Ir al contenido principal

Echo a andar y descubro que tengo piernas

Qué pequeños nos autoimaginamos, nos pensamos y nos sentimos cuando hacemos nuestras todas las creencias limitantes que nos imponen desde que nacemos.
Y cuán grandes nos desplegamos el día que descubrimos que no hay límites y que disfrutamos de un potencial inimaginable e inmenso.
Si no nos retamos, no experimentamos; si no experimentamos, no expandimos nuestra zona de comodidad; si no nos expandimos, no crecemos.
Son tantas las creencias constrictivas que alimentamos, que terminamos viéndonos sin recursos, sin capacidad, sin opciones y, casi lo peor, sin esperanza de que esto pueda ser de otra manera.
Desde aquí nuevamente, una renovada apuesta por la inmensidad del ser humano, de nosotros mismos, incluso, a pesar de nosotros mismos. Porque somos inconmensurables, inefables, y qué bueno sería descubrirlo cada día, descubriéndonos cada día.
La propuesta es clara. Pongámonos en marcha YA, pasemos a la acción y descubramos esa fascinante vida que hemos diseñado para nosotros, porque las piernas, los recursos y nuestras capacidades están ahí, esperando a que nos demos cuenta y nos fijemos en ellos para comenzar a funcionar.
Supongo que ahora pensarás en las mil excusas del catálogo, pero a estas alturas sabes perfectamente que todo son ficciones y que cuando dejes de sustentarlas, observarás que sólo eran ruido.
El camino aparece cuando comienzas a recorrerlo y es en ese hermoso momento cuando te das cuenta de que además tienes unas maravillosas piernas que te ayudan a seguirlo.
Ya es hora de agradecer tu camino. Ya es hora de descubrir que tienes piernas. Ve y empieza a andar.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Trabajo o traalto

Es un simple juego de palabras inventado con un profundo significado para mí. Se trata de la perspectiva desde la que realizo mi actividad profesional. Desde el trabajo o desde el traalto, es decir, desde la obligación, la necesidad y la imposición o desde el disfrute, la creatividad y el deleite. Desde una vibración baja o desde una vibración alta. Desde el conocimiento dirigido o desde los dones y el talento innatos. Haz lo que te gusta y no trabajarás nunca. Esto no quiere decir que no me esfuerce, que no sea perseverante o que no tenga implicación, justo todo lo contrario, si mi actividad deriva de los dones, no trabajo, sólo traalto y transmuto lo que hago porque el origen lo es todo y cambia radicalmente el enfoque y la energía que pongo en ello. Averigua cuáles son tus dones si no lo sabes todavía, dirígete a su realización, dejemos de verlos como aficiones o como sueños colocándolos dentro de nuestras vidas en el centro de nuestra actividad profesional o laboral. Dejemos

El estancamiento no existe, se trata de degradación

Sí, lo sabemos, no podemos no crecer. El estancamiento es ilusorio, es la manera de decir y autoconvencernos de que me "quedo como estaba" sin avanzar, pero no es posible. Todo se mueve, continuamente, todo el rato. Todo varía a cada instante, sólo la limitada percepción humana es capaz de determinar parada, quietud y estancamiento.  En un interminable imaginario. Sin embargo, todo a nuestro alrededor nos informa de que lo estático es puntual para dar paso indefectiblemente a la degradación.  Nada mejora por el no uso, por quedarse como antes, por no aceptar o no permitir el avance. Ciertamente a las personas nos ocurre exactamente eso mismo.  Cuando decidimos que ya está todo hecho, aprendido, conocido, experimentado, y nada queda por mejorar, comienza la degradación y el derrumbe. No nos supongamos como modelo terminado de nosotros mismos, no existe tal, y no estamos aquí para llegar a eso sino para ser infinitos y extraordinarios, y eso se consigue de manera continua y sos

A mi edad, no...

¿Qué quieres hacer? He oído muchas veces esta creencia que parece incapacitarnos para un sinfín de actividades o experiencias en nuestra vida a partir de una determinada edad, cada uno elige cuál para que le sirva de excusa. A mi edad, que paso del medio siglo, no entiendo por qué debo dejar de aprender de mil y una cosas que todavía me quedan por experimentar. No hace tanto comencé a bailar, no hace tanto cambié mi vida completamente saliendo de la zona de confort para entrar en la de pánico (así la llaman, pero debo decir que nunca me he divertido y disfrutado tanto como desde que estoy en ella), hace poco que aprendí..., hace poco que empecé... De eso se trata, según mi teoría, que seguramente no será nada mía, estamos en esta vida física para vivir una experiencia humana extraordinaria, única y genuina, y parece que se nos olvida en cuanto pisamos el suelo. Pues aquí va el reto, no dejes de experimentar, disfrutar, vivir el presente y ser feliz probando cosas nuevas como si